Tralka Estudio

Técnicas y materialidad

Dorado

El Dorado es una técnica decorativa en encuadernación consistente en la utilización de oro en panes o en película para fijar el diseño realizado por el encuadernador o el proyectista. Por extensión se habla de dorado también cuando lo que se aplica  no es oro, sino película sintética. ⁣
⁣Básicamente hay dos clases de dorado en encuadernación: el dorado con hierros y planchas, que se aplica en lomos, tapas, guardas, estuches, etc…,  y el dorado de los cortes, en el que se emplea una técnica y un utillaje distintos, aunque el material, pan de oro, es el mismo. Por extensión frecuentemente se incluye también al aludirse al término dorado, como técnica decorativa, el gofrado o estampación de hierros en seco, dado que los procedimientos son semejantes y se suelen utilizar simultáneamente en la decoración de un libro. ⁣

Tiene sus raíces en la encuadernación árabe desde al menos el siglo XIII,  la encuadernación hispanoárabe y mudéjar la exportó probablemente a Italia a través de Nápoles alrededor del siglo XV. El auge del dorado como técnica  decorativa del libro, viene de la mano del renacimiento italiano con Aldo Manuzio como principal promotor y artista. Con el desarrollo de la Encuadernación como arte y oficio, se expandió por toda Europa, llegando a Latinoamérica a finales del siglo XIX. ⁣

En Chile, exponentes como Federico Schrebler, Ismael Espinosa  y  Mariano Muñoz – Hidalgo , permiten cimentar bases primarias para esta bella técnica y arte; como a su vez, la transmisión de este conocimiento y enseñanza a través de maestros ligados a bibliotecas públicas, universidades, museos, iglesias e iniciativas privadas han logrado que esta memoria material e histórica no se extinga.

Monotipo / Monocopia


El término monocopia indica “una copia” lo cual anula el valor reproductivo del grabado; es conocida también como monotipo en Europa o monoprint en EE. UU y se refiere a una técnica artística que se disputan los pintores y grabadores.

Se utiliza un soporte rígido de plástico o acrílico sobre el cual el artista coloca tinta gráfica realizando distintos efectos y grafismos trasfiriendo este resultado al papel logrando así sólo “un” original gráfico ya que el papel ha recogido la tinta del soporte. El arte gráfico la utiliza en aquellos casos donde no se necesita la multiplicidad o reproducción de la estampa, pues al no existir incisión en la matriz, se complejiza obtener ejemplares iguales.

En el Renacimiento fue utilizada por Giovanni Battista Castiglione (1610-1665) y, como forma de expresión Juan Carlos Castagnino, Pompeyo Audivert, Lino Enea Spilimbergo, Urruchúa, Bigatti, Raquel Former, Víctor Rebuffo, entre otros. En esta técnica suelen utilizarse manchas producidas o efectos imprevistos aprovechando los restos de materia sobre una hoja en desecho, o efectos casuales producidos en la mesa de entintado para construir la imagen. De la misma forma que en el dibujo o la pintura se utilizan texturas o efectos lumínicos y contrastes atmosféricos también con planos y transparencias en las tintas. El registro de elementos texturados como las telas, sogas, hilos, plumas, vegetales y, todo aquel elemento que pueda dejar una huella a través de la tinta gráfica, consiguen formar parte de la composición. Durante mucho tiempo en algunas convocatorias a salones de grabado (y actualmente) no suele aceptarse la monocopia, o bien se lo coloca como una especialidad diferenciándola de las técnicas de reproducción. En los últimos años se han realizado exposiciones específicas de ésta técnica y son aceptadas en salones de relevancia.

 

Proceso